12 mitos sobre la dislexia.

1. La dislexia es una fase de la que los niños salen: Esto es totalmente falso, ya que la dislexia es un problema que permanece con la persona. Dicha persona puede aprender técnicas para que afecte menos a su vida diaria y académica pero esta no se puede curar. Por tanto existen adultos con dislexia, no es solo una condición infantil.
2. Los niños con dislexia son vagos o tontos: Para diagnosticar dislexia se requiere que un niño no consiga un nivel esperado a pesar de su esfuerzo constante y que posea una inteligencia normal. Los niños don dislexia tienen un CI normal y de hecho suelen tener que esforzarse mucho más que un niño normal para hacer las tareas y como consecuencia se cansan más rápido. Para ellos la tarea más simple puede tener un nivel de dificultad muy alto.
3. Los niños con dislexia a pesar de tener problemas para leer y escribir luego son muy dotados en otras áreas: Puede darse el caso de que algún niño tenga unas habilidades en otras áreas pero esto no se debe a la dislexia. La dislexia no afecta a otras áreas.
4. La dislexia no tiene diagnóstico: Existen pruebas de evaluación neuropsicológica que son llevadas por equipos dedicados a ello.
5. Un niño que no invierte letras no es disléxico, uno que sí, si lo es: Por este motivo muchos niños son erróneamente diagnosticado. Los disléxicos pueden invertir las letras pero hay más síntomas, por ejemplo la confusión de sonidos y símbolos visuales es básica. Un niño que invierte letras no tienes por qué ser disléxico.
6. La dislexia consiste primariamente en alteraciones visuo-perceptivas: Aunque pueden darse problemas de lecto-escritura por alteraciones de este tipo, en el caso de la dislexia se debe a un problema de procesamiento. Concretamente su dificultad se encuentra en percibir y procesar bien los fonemas. Así como unirlos con las letras que los representan. Hay estudios de neuroimagen funcional que muestran una activación/reacción diferentes en los cerebros de los niños con dislexia, cuando estos llevan a cabo tareas de procesamiento fonológico. La dislexia tiene una base neurobiológica debido a que es un trastorno del naurodesarrollo. Se da una alteración en el desarrollo neuronal del cerebro mientras el niño crece, pero la percepción de los sentidos del niño funcionan bien, es el nivel cognitivo que se presenta deteriorado de forma específica.
7. No se puede diagnosticar hasta los 8 años: El diagnóstico oficial se recomienda a partir de los 8 años ya que es muy normal que un niño invierta las letras y es muy común hasta los 6 años. Aunque se puede anticipar su aparición o problemas precoces y trabajar en ellos para ver como evoluciona el niño. Así a los 8 años se reevaluará a los 8 años si efectivamente hay dislexia o no.
8. Los niños con dislexia no aprenden a leer: Los niños con dislexia pueden leer. Tal vez les cueste más aprender y sean más lentos a la hora de leer pero pueden leer.
9. La dislexia afecta más a los hombres: La dislexia afecta por igual a hombres y mujeres. La cuestión es que la conducta de los chicos pueden ser más disruptiva que las de niñas y quizás por eso los profesores envíen más a evaluar a los chicos que a las chicas.
10. Si sacas buenas notas y vas bien en el colegio no puedes ser disléxico: Un niño disléxico puede ser un buen estudiante. Con esfuerzo, constancia y motivación pueden ser tan buenos como cualquier otro estudiante. Los disléxicos llegan a la universidad y pueden tener éxito como cualquier otra persona, sobre todo si disponen de las herramientas para adaptar su estudio a sus necesidades.
11. La dislexia es hereditaria: Este caso es especial. Todo depende. Se sabe que la dislexia tiene un fuerte componente hereditario. Por ejemplo, el trastorno se da en el 40% de los hermanos de disléxicos y también se observan patrones del tipo padres con dislexia-hijos con dislexia, en los padres la prevalencia es de un 27-49 %. El problema es que aún todavía no se sabe qué tipo de herencia rige la dislexia. Se postulan marcadores en el cromosoma 15 y 6, pero no está claro. En cualquier caso, podemos decir que no se da una herencia directa. Que un padre tenga dislexia no implica que su hijo vaya a tenerla, simplemente aumenta la probabilidad. Algunos estudios sitúan la influencia en un 60% genética, 40% ambiental.
12. Todos los niños disléxicos son iguales: En realidad existen diferentes perfiles e incluso hay autores trabajando en la creación de subtipos de dislexia. Lo que sí se sabe es que el 87% de los sujetos presentas alteraciones a nivel fonológico.